El fascinante caso de la Hormiga Argentina
Esta pequeña hormiga, llamada Linepithema humile recibe su nombre coloquial (hormiga argentina) por ser originaria del río Paraná, en el norte de Argentina. A pesar de su pequeño tamaño (entre 2 y 3 milímetros) se las ha apañado para ser considerada una de las 100 especies invasoras más dañinas del mundo y tiene el honor de haber formado la unidad cooperativa más grande que se ha registrado nunca, formando una supercolonia que abarca 6000 kilómetros y va desde Italia hasta España. Para que nos entendamos, esto quiere decir que existe una única colonia que abarca todo ese territorio y trabajan de manera colaborativa entre ellas. Existen también supercolonias en Estados Unidos, Japón, Australia y Nueva Zelanda.

Hormiga argentina
¿Cómo se las ha apañado esta criatura tan diminuta para conseguir expandirse con tanto éxito?
La hormiga argentina se encuentra presente en todos los continentes excepto en la Antártida. Se estima que a finales del sigo XIX viajaron entre la carga de algún barco mercante, colonizando nuevos territorios. Pero esto no es algo excesivamente novedoso, ya que hay muchos insectos e incluso animales que han llegado a otros continentes de la misma forma.
¿Cuál es el secreto de esta hormiguita para ser una invasora tan efectiva?
Si lo analizamos en detalle, todo en ella parece diseñado para ser la colonizadora perfecta. Veamos:
- No requiere de vuelos nupciales para reproducirse, a diferencia de la gran mayoría de especies autóctonas de los continentes invadidos. Esto quiere decir que las princesas y los machos pueden copular en el interior de los hormigueros sin necesidad de salir al exterior en los clásicos vuelos. Por tanto, el índice de supervivencia de reinas recién fecundadas podríamos decir que se aproxima al 100%, mientras que este mismo índice en las hormigas que requieren de vuelos se sitúa más próximo al 1%. Y es que en los vuelos nupciales están expuestas a innumerables peligros, desde ser devoradas por pájaros mientras vuelan, verse afectadas por inclemencias del tiempo, ser devoradas por otros insectos o animales una vez caen al suelo para fundar el hormiguero, ser pisoteadas por animales más grandes (humanos incluidos)…y las que sobreviven a eso, deben conseguir encontrar un lugar adecuado donde fundar la colonia, con la dificultad que esto entraña (terreno apropiado para excavar, acceso a fuente de agua, temperatura adecuada….). Ninguno de estos peligros existe para la hormiga argentina.
- Es poligínica. Esto quiero decir que pueden coexistir varias reinas en un mismo hormiguero. Puede haber incluso cientos, lo que significa que la población puede ir creciendo a un ritmo bestialmente alto. Haciendo cálculos simples, una reina puede poner 30 huevos al día. Si hay 100 reinas, el número de huevos diarios asciende a 300. Es decir, más de 2000 nuevos individuos al día solamente en un hormiguero de la supercolonia. 14.000 en una semana. Más de 50.000 en un mes.
- Fundan nuevos hormigueros por gemación. Como ya hemos dicho, las reinas se reproducen en el interior de los hormigueros. En ocasiones, alguna reina decide colonizar nuevos territorios y para ello coge a un grupo de unas 20 obreras y se van todas juntas a buscar nuevas tierras. Estas obreras cuidarán de la reina, la protegerán y la alimentarán. De esta manera, se crea una nueva colonia próxima a la original.
- La clave: todos los puntos anteriores ya son factores de éxito por sí mismos. Pero el secreto de la Linepithema humile es que las hormigas de esta especie de colonias diferentes no se atacan entre sí. En cambio, se reconocen como «parientes» y trabajan de manera colaborativa, uniéndose para dominar al resto de especies de hormigas autóctonas, que no tienen ninguna posibilidad ante este ejército argentino. Esta es la clave de que existan supercolonias que abarcan hasta 6.000 kilómetros.
El motivo por el que hormigas argentinas de colonias diferentes no se ataquen entre sí continúa siendo un misterio aún no resuelto del todo, aunque la clave parece ser genética. Y es que en su lugar de origen (Argentina), las Linepithema humile son muy agresivas entre sí, y hormigas de colonias diferentes se atacan hasta despedazarse.
¿Por qué cuando la hormiga argentina llega a otro continente empieza a actuar de manera cooperativa?
Como hemos comentado, parece que la explicación es la carga genética de estas colonias. En su lugar de origen la carga genética de las colonias es variada y eso hace que no se reconozcan entre sí como «parientes» y se ataquen. En cambio, en los continentes que colonizan, todas las colonias parten de un mismo origen, tal vez de la reina colonizadora primigenia, y su diversidad genética es pequeña. Esto hace que se reconozcan como «primos» y colaboren como una única colonia.
Por tanto, hemos visto que se trata de una hormiga con unas reinas con una capacidad de supervivencia mucho más alta de lo normal, con capacidad para tener hasta 100 reinas en una misma colonia, con capacidad para expandirse por gemación con ayuda de obreras ya adultas y con la capacidad para colaborar entre colonias. Todo esto hace que se trate de la invasora perfecta. Su presencia es una grave amenaza para las especies autóctonas, que no pueden competir contra la capacidad de supervivencia de la Linepithema humile. Éstas además, se muestran muy agresivas con otras especies, no dudando en atacar sus hormigueros y apropiándoselos. Su pequeño tamaño (caben hasta por agujeros de 1 mílimetro) y su gran número hace que sea muy difícil para el resto de especies plantarles cara. Pero no solo son una amenaza para las especies de hormigas autóctonas. Su gran voracidad hace que su presencia también repercuta en el resto de invertebrados de la zona. Incluso son capaces de atacar a animales de pequeño tamaño, como crías de aves. Esto hace que sean un peligro para el ecosistema que invaden, y la explicación de por qué está clasificada como una de las 100 especies invasoras más dañinas del mundo.
¿Cómo se puede detener el avance de la hormiga argentina?
Probablemente, la única especie capaz de detener su expansión sea ella misma. Y es que se ha detectado la presencia de otra supercolonia que, por motivos desconocidos, no colabora con la supercolonia Europea. Y aunque parezca de chiste, se trata de la llamada colonia catalana, que va desde Cataluña hasta Valencia, y que actúa como colonia independiente.
Como curiosidad, y para que quede patente su habilidad invasora, se han dado muchos casos de criadores de hormigas que de un día para otro han visto sus hormigueros artificiales, perfectamente colocados dentro de casa y con especies autóctonas, llenos de hormigas argentinas y con la colonia original totalmente destruida. Y es que se las apañan para colarse por cualquier rendijilla que quede en alguna conexión para proceder con la invasión.
Por este mismo motivo hay que tener mucho cuidado si se quiere criar en cautividad esta especie, ya que se pueden escapar con facilidad y atacar a otras colonias que se esté criando. Y aunque sea algo obvio, nunca está de más recordarlo: no se debe criar jamás esta especie en zonas en las que no está presente, ya que podemos causar una catástrofe ecológica si por algún motivo la reina consiguiera escapar y fundar una colonia en el exterior.